Muestras de solidaridad

Por múltiples vías he recibido muestras de solidaridad tras mi salida del Listín Diario. Provienen de gentes del pueblo y de conocidos amigos a quienes de veras agradezco las valoraciones que expresan sobre mi decisión y mi persona. Aparte de las que figuran en los comentarios de la parte inferior de esta página, les presento una carta que me manda el staff de Redacción de Dominicanos.Hoy, uno de nuestros mejores sitios informativos en la Web, de los primeros en difundir la noticia sobre mi renuncia, y otra de mi apreciado cuñado Freddy Gómez.

Mi salida del Listín

Muchos amigos y muchos lectores me han llamado para preguntar por cuáles razones he dejado la Dirección del Listín Diario. Aquí las expongo, en una carta dirigida a mis estimados don Ramón Báez Romano y Ramón Báez Figueroa, propietarios del diario, por quienes siento una alta admiración y respeto y con quienes siempre mantendré una relación de pura amistad y lealtad sin quebraduras. He aquí la carta:

No sólo «libre acceso», sino «libre flujo» de las informaciones

Todo el mundo sabe que Estados Unidos es una nación donde la libertad de expresión e información se encuentra bien garantizada y amparada.

Allí, pese a ciertas excepciones y ciertos excesos, esa libertad refulge, creando una cultura de la transparencia que en gran medida ha contribuido a fortalecer la democracia y a apuntalar el derecho de los individuos a procurar información de todo cuanto es posible revelar de las acciones de sus gobiernos, de sus congresistas, de sus figuras públicas, como los políticos, y hasta de sus instituciones privadas.

Existe, desde hace tiempo, la ley de libertad de información que se afinca, a su vez, en las enmiendas constitucionales que abren los caminos al ejercicio expedito de esa necesidad de información (siempre y cuando no clasifique como de seguridad nacional), pero como ocurre en toda sociedad en la que chocan tantos intereses específicos, en no pocas ocasiones esa ley ha sido acomodaticiamente interpretada para impedir que una investigación periodística seria llegue hasta el fondo de las realidades de un problema.

Un día sin los políticos, para descontaminarnos

De seguro que los lectores del Listín están hoy experimentando alguna sensación extraña al pasar página y página y no hallar en ellas algo de la verborrea política cotidiana que, como una gran nube de dióxido de carbono, contamina nuestro ambiente, opacando nuestra visión y agitando nuestros espíritus.

De seguro que, ante tan repentina limpieza visual, muchos sintieron que el periódico de todos los días no le producía hoy la tensión y la preocupación que generan los chismes, los dimes y diretes de los políticos, consumidos en los enfrentamientos y las descalificaciones, mientras el pueblo se queda a la espera de ideas y palabras más concretas acerca de cómo enfrentar tantas dificultades que tenemos encima, ahora, más las que vienen.

Los «fantasmas» dominicanos

Los fantasmas dominicanos son afortunados y sabios. Y aparte de eso, demasiado diestros para no permitir que nadie rasgue su magica «invisibilidad», de la que han sacado siempre los mayores provechos.

Los fantasmas de aquí cobran puntualmente en nombre de gentes que ya dejaron este mundo. Se las arreglan para recibir pensiones del Seguro Social o de la secretaria de Finanzas. O para obtener cédulas nuevas o actas de nacimiento y certificaciones oficiales que les permitan viajar al exterior, cambiar de identidad o votar de manera campante en unas elecciones.

Gallos en yola

En la lluvia de teorías que han manejado las autoridades para explicar cómo pudo entrar al país la gripe aviar está la de que los gallos que la portaban llegaron en yolas a nuestra tierra.

Esta versión pudo ser mas verosímil si nos dijeran que eso ocurrió en tiempos de los taínos, previos al Descubrimiento de América, pero no ahora, en el siglo XXl. A propósito: ¿Y de dónde, ciertamente, habrían llegado?.

Ellos parten de la suposición que fue de Puerto Rico, que es el punto más cercano en nuestra geografía. Y la suposición, a su vez, pretende ser reforzada con el argumento de que al estar en Higüey (la provincia más oriental del país y la más próxima a la otra isla) probablemente entraron en algunas de las yolas que transportan ilegales a cada momento.

Muchos se resisten a la transparencia

La adopción de leyes de acceso a la información pública se ha ido generalizando gradualmente en América Latina, pero aún falta por vencer la resistencia de funcionarios o autoridades a toda transparencia.

En Brasil hubo que librar una gran batalla para que un periodista que investigaba la fortuna de los dirigentes políticos y los legisladores lograra sus propósitos, luego que el tribunal supremo de elecciones, en medio de la presión de la opinión pública, obligara a esos líderes y congresistas a divulgar sus patrimonios.

Fernando Rodríguez, el periodista, se interesó un día por conocer los gastos en que incurren los legisladores para establecer si los salarios que ganan, o el patrimonio que los respalda, los justificaban.

Chávez, pillado por las FARC

Las FARC han pillado al Presidente Chávez, de Venezuela, haciéndole creer que estaban dispuestas a liberar a tres rehenes, entre ellos el niño Enmanuel (o Juan David Gómez Tapiero), como parte de un esfuerzo por la anhelada paz en Colombia.

La propuesta, en principio, parecía apropiada para capitalizarla políticamente, luego del fracaso del intento de reforma constitucional en Venezuela y del «boche» del rey Juan Carlos a Chávez en la Cumbre Iberoamericana (¿Por qué no te callas?), así como del primer esfuerzo (también malogrado por un exceso de protagonismo del presidente venezolano) para lograr una señal de luz verde al proceso de pacificación colombiano.

El gran poder de los blogs

Los “blogs” han logrado buscarle una vuelta apropiada a los ambientes en que la libertad de expresión es asfixiada o severamente limitada. No obstante ser una excelente vía de escape a la censura, su utilidad y su propia “libertad” han comenzado a peligrar.

Los gobiernos se han dado cuenta de que, a través de la información que fluye por la red tanto mediante los chateos de cibernautas, los “blogs” de ciudadanos o entidades y las comunicaciones telefónicas, han quedado perforadas muchas de las murallas de silencio y restricción que imponían a la prensa o a los propios ciudadanos en el caso de sociedades cerradas o dirigidas por autócratas.

Leonel, en dos dimensiones radicalmente distintas

Leonel, el Presidente, y Leonel, el candidato, son dos personas distintas, diferenciadas en sus comportamientos frente al pueblo.

En su primera dimensión, el Presidente asiste a los actos públicos y alrededor de las tribunas se despliegan barricadas de metal, agentes secretos, guardias y policías uniformados, y el acceso de cualquier ciudadano implorante de ayuda se torna difícil, para no decir imposible.